Brasil: Campaña de derechos humanos en barrios marginales ante operación policial

Amnistía Internacional y dos ONG asociadas se dirigirán a decenas de miles de residentes de una de las mayores favelas de Río de Janeiro para asegurarse de que conocen sus derechos humanos ante la próxima operación policial destinada recuperar la zona de las bandas delictivas armadas.

Desde el 6 de noviembre, Amnistía Internacional y las ONG locales Redes de Desenvolvimento da Maré y Observatório de Favelas distribuirán alrededor de 50.000 paquetes de información a los residentes de los barrios marginales de la zona de Maré de la ciudad brasileña.

La campaña “Somos de Maré y tenemos derechos” tiene por objeto evitar los tipos de violaciones de derechos humanos que se han cometido en operaciones recientes similares en las que se instalaron Unidades de Policía Pacificadora (UPP) en favelas de Río.

“Queremos acabar con la idea de que algo sucede porque hay una ‘guerra’ contra la delincuencia organizada; esto incluye poner fin a la violación de los derechos de los residentes de las comunidades donde se instalan las UPP”, ha declarado Átila Roque, director de Amnistía Internacional Brasil.

“Las operaciones policiales para pacificar zonas de elevada delincuencia sólo se justifican si pueden garantizar los derechos de todos los ciudadanos, comenzando por los residentes de la barriada marginal.”

Los paquetes de información que repartirán las ONG incluyen información sobre los derechos y las obligaciones de los habitantes del barrio en el caso de que sean abordados por la policía en la calle o en sus casas.

El paquete incluye un cartel en el que se enumeran las actuaciones policiales consideradas inaceptables, que incluyen entrar en un domicilio sin orden judicial, discriminar a una persona por cualquier motivo o poner en peligro la vida de los residentes mediante el uso de armas de fuego en zonas densamente pobladas.

Las organizaciones reconocen que la policía de Río de Janeiro tiene la obligación de desempeñar sus funciones, pero les insta a que traten a los residentes de Maré con respeto y cortesía.

La campaña es parte de las iniciativas que han puesto en marcha varios grupos de la sociedad civil para trabajar junto con los residentes de los barrios marginales de Río de Janeiro a fin de mejorar sus conocimientos sobre derechos humanos.

“El propósito de la campaña es empoderar a la gente de las favelas para que puedan desempeñar su papel a la hora de garantizar su propia seguridad y la de sus vecinos”, afirmó Eliana Silva, directora de Redes de Desenvolvimento de Maré.

Los gobiernos federal y estatal vienen trabajando conjuntamente para “pacificar” las zonas de elevada delincuencia de las favelas de Río de Janeiro con el objetivo de instalar 40 Unidades de Policía Pacificadora en estas zonas antes de 2014. Además de mantener el orden público en zonas previamente controladas por bandas delictivas y milicias —en algunos casos desde hace más de dos decenios— el programa tiene como fin llevar unos servicios sociales muy necesarios a algunas de las zonas más empobrecidas de la ciudad.

En la zona de Maré —integrada por 16 favelas distintas— viven 130.000 personas, lo que la hace más populosa que el 80 por ciento de las ciudades brasileñas.

“Partimos del supuesto fundamental de que la ciudad debe ser para todos. No podemos tolerar que un policía trate a los residentes de forma distinta debido al color de su piel, su preferencia sexual, su aspecto físico o su clase social, sea en Maré o en zonas más acomodadas de la ciudad”, declaró Jaílson Silva, coordinador general de Observatório de Favelas.

“Queremos que la gente sienta la ciudad como algo propio y conozca sus derechos como primer paso para que todos puedan circular con libertad y seguridad, empezando por sus propios barrios.”