China debe revelar el paradero de menores uigures detenidos tras enfrentamiento mortal

Las autoridades chinas deben revelar el paradero de hasta cinco niños uigures que, según informes, fueron detenidos tras un enfrentamiento mortal con la policía el 28 de diciembre en Hotan, en la Región Autónoma Uigur del Sin-kiang, en el oeste de China.Según fuentes del gobierno chino, siete miembros del grupo étnico minoritario uigur murieron cuando trataban de cruzar ilegalmente la frontera occidental china, otros cuatro resultaron heridos y cuatro más, detenidos. En el enfrentamiento murió también un jefe adjunto de policía local, según las fuentes, por heridas de arma blanca.Según fuentes locales que hablaron con Radio Free Asia, sigue sin conocerse el paradero de al menos cinco menores de entre siete y 17 años que formaban parte del grupo. Se cree que están bajo custodia oficial y que algunos podrían estar heridos de gravedad.La agencia de noticias china Xinhua dijo, citando a un funcionario del gobierno regional de Sin-kiang, que “un grupo de ‘terroristas violentos’ secuestró a dos personas en las zonas montañosas remotas del condado de Pishan, en la prefectura de Hotan […]. La policía abrió fuego cuando los secuestradores ‘se resistieron a la detención’”.Según los informes, las autoridades han respondido al incidente con una campaña de represión contra las comunidades uigures locales. Los informes indican que más de 30 lugareños uigures han sido detenidos, muchos de los cuales son miembros de las familias extensas de los implicados.“La explicación oficial de que hubo personas que murieron porque ‘se resistieron a la detención’ no responde a cómo siete personas terminaron muertas por disparos y varias más resultaron heridas”, declaró Sam Zarifi, director del Programa para Asia y Oceanía de Amnistía Internacional. “Incluso si los sospechosos emplearon la fuerza contra la policía, el número de muertos y heridos en este incidente suscita serias preguntas sobre si se hizo un uso innecesario de medios letales, lo que violaría las directrices de la ONU. Esto es algo que debe explicar el gobierno.”Radio Free Asia, que ha hablado con varias fuentes que conocen a los uigures implicados en el incidente, ha informado de que el grupo huía de China debido a la represión religiosa. Al parecer, uno de los fallecidos había estado detenido tres meses por asistir a clases prohibidas de educación religiosa.Según los informes, dos de las siete personas fallecidas eran mujeres, y con el grupo viajaban hasta cinco menores de 17 años.Uno de los detenidos podría ser un niño de siete años que resultó herido en la escaramuza.Los habitantes locales también creen que entre los detenidos hay un niño de nueve años, mientras que, según informes, un policía ha confirmado que uno de los detenidos heridos tiene 17 años.“Las autoridades chinas deben informar sobre el paradero y el estado de salud de estos menores desaparecidos y proporcionar atención médica inmediatamente a quienes la necesiten”, declaró Sam Zarifi.“China, como firmante de la Convención sobre los Derechos del Niño, está obligada por las normas sobre la detención de menores a garantizar que éstos son detenidos sólo como último recurso y durante el tiempo más breve posible.”Según Radio Free Asia, varias fuentes locales, incluido un agente de policía, dijeron que el enfrentamiento se desencadenó cuando el jefe adjunto de policía agarró a una de las mujeres cuando el grupo hizo una parada en las montañas mientras intentaba salir ilegalmente del país.Las autoridades vienen empleando controles estrictos y medidas de represión para responder a lo que perciben como una amenaza a su autoridad por parte de las minorías étnicas uigures descontentas con el gobierno chino.Según funcionarios del gobierno local, esto incluye “medidas de represión contra el extremismo religioso”.El gobierno une las prácticas culturales y religiosas uigures con el “terrorismo” en el concepto de “las tres fuerzas”, a saber: “terrorismo, separatismo y extremismo religioso”.La represión se intensificó desde el estallido de violencia que siguió a las protestas, inicialmente pacíficas, de Urumqi de julio de 2009, en las que, según cifras oficiales, murieron 197 personas y más de 1.400 fueron detenidas.Uigures de toda condición denuncian una grave discriminación en el empleo, incluso hacia quienes hablan bien el chino mandarín y estudiaron en universidades chinas.Los editores de sitios web uigures han sido castigados con largas penas de prisión por permitir la publicación en sus sitios web de textos sobre protestas.Muchos uigures han sido detenidos arbitrariamente y encarcelados acusados de “secesionismo” o “incitación al separatismo” por ejercer su derecho a la libertad de expresión, de asociación y de religión.