El sindicalista iraní Esmail Abdi se declaró en huelga de hambre el 24 de abril para protestar contra el trato que reciben los profesores y los trabajadores en Irán, por un lado, y contra el rechazo de su petición de un permiso carcelario, por el otro. Es preso de conciencia y está cumpliendo una pena de seis años en la prisión de Evin de Teherán por sus actividades sindicales pacíficas.