Mansour Ossanlu, presidente de un sindicato independiente no reconocido en Irán, que se hallaba recluido en la prisión de Reja’i Shahr, salió en libertad con un permiso médico el 2 de junio de 2011. Gholamreza Gholamhosseini, también sindicalista, quedó en libertad bajo fianza de una cantidad equivalente a 30.000 dólares estadounidenses el 27 de abril de 2011. Otros dos sindicalistas continúan bajo custodia.