Li Shanshan (李姗姗) fue detenida en Tangshan, provincia de Hebei, en el norte de China, el 29 de octubre. Las autoridades chinas afirman que le han impuesto dos años de “reeducación por el trabajo”, pero se niegan a dar detalles del lugar donde está encarcelada. Está expuesta a sufrir tortura y otros malos tratos.