Amnistía Internacional ha documentado que las investigaciones sobre feminicidios precedidos de desaparición en el Estado de México son deficientes porque se pierden evidencias, no se investiga suficiente y no se aplica correctamente la perspectiva de género. Además, las familias son revictimizadas porque deben invertir tiempo y dinero en investigar y presionar a las autoridades para que investiguen, y porque frecuentemente son amenazadas y maltratadas por algunas personas responsables de los delitos y, a veces, también por autoridades. Este informe explora estos temas.