Ana Patricia Fermín lleva recibiendo amenazas de muerte de la policía desde abril de 2014, cuando denunció que dos de sus familiares habían sido torturados bajo custodia policial en la zona norte de las afueras de la capital, Santo Domingo. Su esposo y uno de los hombres torturados murieron por disparos de la policía en septiembre. Su seguridad peligra.