El pasado miércoles, Amnistía Internacional publicó un informe detallado sobre la masacre del “Lunes Sangriento” perpetrada el 28 de septiembre de 2009 por unidades de las fuerzas armadas, la gendarmería y la policía guineanas en Conakry. Durante la masacre y después de ella, más de 150 civiles desarmados murieron, y decenas de personas fueron violadas, secuestradas y torturadas.