Se ha intensificado la preocupación por la supervivencia de la comunidad indígena sawhoyamaxa de Paraguay, mientras han cesado las negociaciones con las autoridades para garantizar que puede regresar a sus tierras ancestrales. La comunidad lleva muchos años viéndose obligada a vivir en condiciones deplorables junto a una carretera porque sus tierras están en manos de propietarios privados.